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¿CÓMO LO HACEMOS?

¿Te gustaría saber cuál es la magia de nuestras películas? ¿Cómo están realizadas? ¿Cómo es posible que los clicks de Playmobil se muevan solos? La respuesta es más sencilla de lo que parece, y se puede decir en solo una palabra:  stop-motion.

¿QUÉ ES EL STOP-MOTION?

También conocido como animación fotograma a fotograma, es una de las técnicas más antiguas de la historia del cine. Sus orígenes se remontan al cineasta e ilusionista francés Georges Méliès, que la utiliza por primera vez en 1896. Desde esa época ha estado ligada a la creación de efectos especiales cuando todavía no existía la animación digital por ordenador. El mundo perdido (1925), King Kong (1933) o Star Wars (1977) son algunas de las producciones para las que se usó esta técnica.

Estos efectos especiales podríamos decir "primitivos" fueron los que inspiraron al director Tim Burton a usar el stop-motion para sus películas de animación, como técnica alternativa a la animación tradicional, es decir,

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los dibujos animados. El stop-motion sigue ocupando un lugar en el cine actual, ya no como efecto especial, sino como técnica de animación a través de películas de productoras como Aardman o Laika.

 

Hay dos grandes tipos de animación stop-motion. Uno de ellos utiliza modelos de plastilina pasta moldeable para crear y animar los personajes; y otro, el que usamos nosotros, figuras rígidas articulables, en nuestro caso los clicks de Playmobil.

EL PROCESO DE CREACIÓN DE UNA PELÍCULA DE ESA STUDIOS


Cada uno de nuestros largometrajes o mediometrajes (40 minutos o superior) lleva tras de sí alrededor de un año de trabajo. En el caso de los cortometrajes (5-10 minutos) el proceso de producción es más corto, se puede alargar durante uno o dos meses, dependiendo de la película en sí. ¿Pero cómo es este proceso? Al igual que las películas de cine se divide en tres fases: pre-producción, producción y post-producción.

Investigar y escribir

Mi trabajo como director y escritor de ESA STUDIOS comienza en la pre-producción. La primera tarea es decidir sobre qué temática de Playmobil será la futura película: piratas, romanos, vikingos, caballeros... ¡hay un montón donde escoger! Una vez elegida la temática, toca examinar los sets y las figuras que contiene, cuáles podrían servir para contar una historia, y cuáles no; y qué historia se podría contar con ellos. En cuestión de semanas (o meses, dependiendo de la película), esa historia pasa a ser un guion, en el que se detallan todos los lugares, personajes, situaciones y diálogos que sucederán en la película. Es la transmisión por escrito de la misma.

 

Una vez ya tenemos terminado el guion podemos pasar a la fase de producción. Es hora de reunir los clicks (si no los tenemos ya) protagonistas de la historia, y empezar a realizar la animación mediante la técnica del stop-motion, fotograma a fotograma. Para un largometraje como El último dragón pueden llegar a ser necesarias más de 7000 u 8000 fotografías. Cada una de ellas corresponderá a un fotograma de la película.

Paralelamente al rodaje con las figuras de Playmobil se realiza la grabación del doblaje, con los actores y actrices que se encargan de dar voz a cada uno de los personajes de la película. Es la fase en la que más gente se necesita, a lo largo de la historia de nuestra pequeña gran productora han pasado más de 40 intérpretes distintos.

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Y finalmente, una vez que ya tenemos la animación y el doblaje, puede empezar la última fase: la post-producción, donde se monta y se edita todo lo que hemos grabado, dando forma a la película. ¡Y voilà! Ya tenemos nuestra nueva producción lista para su estreno.

VÍDEOS DE MAKING OF

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